Los nanomateriales son partículas diminutas,
invisibles para el ojo humano, que se encuentran presentes en nuestra vida
diaria en productos ordinarios como los alimentos, los cosméticos, los
dispositivos electrónicos y los medicamentos.
Algunos nanomateriales son naturales,
mientras que otros son subproductos de actividades humanas, o se fabrican
específicamente para un determinado fin. Aunque presentan numerosas propiedades
beneficiosas, existen grandes lagunas en nuestro conocimiento de los riesgos
que conllevan para la salud. Por tanto, deben adoptarse precauciones especiales
en la gestión de estos materiales mientras avanza la investigación al respecto.
¿Qué son los nanomateriales?
Muchas organizaciones
coinciden al definir los nanomateriales en el hecho de que contienen partículas con una o varias dimensiones externas entre
1 y 100 nanómetros (nm). Véase la definición de los nanomateriales de
la Comisión Europea .
Los nanomateriales, (hasta 10.000 veces más pequeños que un cabello humano), son de una dimensión comparable a la de los átomos o las moléculas, y toman su nombre de sus minúsculas estructuras (un nanómetro es igual a 10-9 metros). No sólo por su diminuto tamaño, sino también por otras características físicas y químicas que presentan (entre otras, su forma y superficie), los nanomateriales difieren en sus propiedades de los mismos materiales a una escala mayor.
Debido a tales diferencias, los nanomateriales brindan oportunidades nuevas y apasionantes en ámbitos como la ingeniería, la tecnología de la información y la comunicación, la medicina y los farmacéuticos, por nombrar sólo algunos. Sin embargo, estas mismas características que les confieren sus propiedades singulares, son responsables además de sus efectos en la salud humana y el medio ambiente.
Los nanomateriales, (hasta 10.000 veces más pequeños que un cabello humano), son de una dimensión comparable a la de los átomos o las moléculas, y toman su nombre de sus minúsculas estructuras (un nanómetro es igual a 10-9 metros). No sólo por su diminuto tamaño, sino también por otras características físicas y químicas que presentan (entre otras, su forma y superficie), los nanomateriales difieren en sus propiedades de los mismos materiales a una escala mayor.
Debido a tales diferencias, los nanomateriales brindan oportunidades nuevas y apasionantes en ámbitos como la ingeniería, la tecnología de la información y la comunicación, la medicina y los farmacéuticos, por nombrar sólo algunos. Sin embargo, estas mismas características que les confieren sus propiedades singulares, son responsables además de sus efectos en la salud humana y el medio ambiente.
¿Dónde se encuentran nanomateriales?
Los nanomateriales se encuentran
presentes de manera natural, por ejemplo, en las emisiones volcánicas, y pueden
ser subproductos de actividades humanas, como en los humos de escape de los
motores diesel o en el humo del tabaco. En cualquier caso, revisten
especial interés los nanomateriales manufacturados, y estos se encuentran ya en
una gama muy amplia de productos y aplicaciones.
Algunos de
estos nanomateriales se han utilizado durante décadas, como la sílice amorfa
sintética, por ejemplo, en el hormigón, los neumáticos y los productos
alimentarios. Otros se han descubierto en fecha más reciente, como el
nano-dióxido de titanio, como agente bloqueante de los rayos UV en pinturas o
filtros solares; la nano-plata, como antimicrobiano en textiles y aplicaciones
médicas; o los nanotubos de carbono, extensamente utilizados por su fuerza
mecánica, peso ligero, propiedades de disipación del calor y conductividad
eléctrica en aplicaciones como la electrónica, el almacenamiento de energía,
las estructuras de naves espaciales y vehículos, y el equipamiento deportivo.
Las nuevas generaciones de nanomateriales siguen desarrollándose con rapidez, y
se prevé el crecimiento del mercado de estos productos.
¿Qué motivos de inquietud en el
terreno de la salud y la seguridad se asocian a los nanomateriales?
Existen motivos de inquietud
significativos en lo que respecta a los efectos de los nanomateriales en la
salud. El Comité Científico de los Riesgos Sanitarios Emergentes y Recientemente
Identificados (CCRSERI) determinó que existen riesgos
comprobados para la salud vinculados a varios nanomateriales manufacturados. No
obstante, no todos los nanomateriales ejercen necesariamente un efecto tóxico,
y conviene adoptar un enfoque de actuación «caso por caso» al respecto mientras
avanzan las investigaciones en curso.
Los efectos más importantes de los
nanomateriales se han observando en los pulmones, e incluyen, entre otros,
inflamaciones y daños de tejidos, fibrosis, y generación de tumores. El sistema
cardiovascular también puede verse afectado. Algunos tipos de nanotubos de
carbono pueden dar lugar a efectos similares a los del amianto. Además de los
pulmones, se ha determinado que los nanomateriales pueden alcanzar otros
órganos y tejidos, entre los que se cuentan el hígado, los riñones, el corazón,
el cerebro, el esqueleto y diversos tejidos blandos.
Como resultado de su pequeño tamaño y
su gran superficie, los nanomateriales particulados en forma de polvo pueden
plantear riesgos de explosión, mientras que sus correspondientes materiales en
bruto puede que no.
Véase la revisión de la Comisión
Europea sobre los Tipos y usos de nanomateriales, incluidos los aspectos de seguridad ,
y una revisión bibliográfica de EU-OSHA sobre la «Exposición a
nanopartículas en el lugar de trabajo».
¿Cómo se produce la exposición a
nanomateriales en los lugares de trabajo?
Los trabajadores pueden entrar en
contacto con nanomateriales en la fase de producción. Sin embargo, un número
mucho mayor de trabajadores puede verse expuesto a los mismos en diversas
etapas de la cadena de suministro, y es posible incluso que ignoren que se
encuentran en contacto con nanomateriales. En consecuencia, es poco probable
que se adopten medidas suficientes para evitar la exposición. Véase nuestra
revisión bibliográfica sobre la percepción y la
comunicación del riesgo relacionado con los nanomateriales en los lugares de
trabajo.
En este sentido, la exposición puede producirse en
diversos entornos profesionales en los que los nanomateriales se utilizan,
manipulan o procesan y, como consecuencia, se propagan por el aire y pueden
inhalarse, o entrar en contacto con la piel, como en los contextos que van de
la asistencia sanitaria o el trabajo en laboratorios, a las labores
de mantenimiento.
Gestión de los riesgos de los
nanomateriales en el lugar de trabajo
La legislación de la UE sobre la
protección de los trabajadores se aplica a los nanomateriales, aunque no se
refiere explícitamente a los mismos. Revisten especial importancia la Directiva marco
89/391/CEE, la Directiva sobre
agentes químicos 98/24/CE, y la Directiva
relativa a los agentes carcinógenos o mutágenos 2004/37/CE, así como
la legislación sobre sustancias químicas (REACH y CLP ).
En ellas se dispone que los empleadores están obligados a evaluar y gestionar
los riesgos de los nanomateriales en el trabajo. Si la utilización y la
generación de nanomateriales no puede eliminarse ni sustituirse por materiales
y procesos menos peligrosos, la exposición de los trabajadores deberá reducirse
al mínimo mediante medidas acordes con la jerarquía de control, otorgando
prioridad a:
1) Las medidas técnicas de control en
origen;
2) Las medidas organizativas;
3) Los equipos de protección personal,
como último recurso.
Aunque se mantienen numerosas
incertidumbres, existen importantes motivos de preocupación respecto a los
riesgos para la salud y la seguridad que plantean los nanomateriales. Por
tanto, los empleadores, junto con los trabajadores, deberán aplicar un enfoque
de precaución respecto a la gestión de riesgos en la elección de medidas preventivas.
Puede resultar difícil identificar los
nanomateriales, así como sus fuentes de emisión y niveles de exposición; sin
embargo, existen directrices y
herramientas para ayudar a gestionar los riesgos asociados a los
mismos en el lugar de trabajo.
Véase el asesoramiento más específico
de EU-OSHA sobre el modo de gestionar los riesgos de los nanomateriales en el sector de la
asistencia sanitaria, y en lostrabajos de
mantenimiento. Otras organizaciones han elaborado igualmente
materiales informativos de utilidad, por ejemplo, sobre los nanomateriales en
laconstrucción y en la industria de los muebles , y en el ámbito de la investigación
y el desarrollo .
Descubra cómo han gestionado otras
empresas los nanomateriales en nuestros ejemplos de
buenas prácticas en la gestión de nanomateriales en el lugar de trabajo.
Fuente:
osha.europa.eu
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